Resumen NUEVAS INSTRUCCIONES PREVIAS EN Castilla y León

El nuevo decreto de Castilla y León sobre las instrucciones previas, conocido como Decreto 23/2024, de 21 de noviembre, regula el procedimiento de formalización de estas instrucciones en el ámbito sanitario y organiza el funcionamiento del Registro de Instrucciones Previas de Castilla y León (REIP). Aquí está un resumen clave:

• Concepto de Instrucciones Previas: Se refiere al derecho de una persona a dejar por escrito y con antelación decisiones sobre los cuidados y tratamientos de su salud, en previsión de situaciones futuras donde no pueda expresar su voluntad.
• Formalización: Las instrucciones previas pueden formalizarse ante notario, tres testigos o personal de la Administración. El decreto fortalece la opción de hacerlo ante personal administrativo para facilitar el ejercicio de este derecho.
• Registro: Aunque no es obligatorio, se recomienda inscribir el documento en el REIP para garantizar que los profesionales sanitarios puedan acceder y aplicar estas instrucciones cuando sea necesario. La inscripción puede hacerse presentando la solicitud junto con el documento original.
• Acceso y Consulta: Los otorgantes y sus representantes pueden consultar el documento registrado mediante certificado digital o DNI electrónico a través de la Carpeta del Paciente o directamente en el acceso proporcionado por el registro.
• Contenido: El documento puede incluir deseos sobre cuidados médicos, situaciones de incapacidad, dependencia, destino de órganos tras el fallecimiento, y desde 2021, también puede incluir la solicitud de ayuda para morir (eutanasia) bajo ciertas condiciones médicas y legales.
• Unidades Habilitadas: Se han creado unidades habilitadas del Registro en cada provincia para hacerlo más accesible.
• Protección de Datos: Se garantiza la privacidad y la seguridad de la información personal y de las instrucciones previas registradas.
• Interoperabilidad: El sistema está diseñado para ser accesible por cualquier profesional sanitario que necesite tomar decisiones clínicas en ausencia de la capacidad de decisión del paciente.

Este decreto deroga el anterior Decreto 30/2007, adaptándose a la legislación más reciente, incluyendo la Ley de Eutanasia de 2021, y busca facilitar y asegurar el cumplimiento de las voluntades anticipadas de los ciudadanos de Castilla y León.